En esta ocasión realizaremos una poda de mantenimiento en un tamarix; en el círculo de amistades que tengo en el bonsai me he encontrado con no pocas personas a las que esta especie no les acaba de gustar; personalmente creo que tiene bastantes cosas a favor, como una bonita corteza, una madera fuerte que puede dar bonitos sharis, así como sus peculiares hojas y flores que le dan un aspecto plumoso y delicado; y a mí me recuerda a veranos cerca del mar.
Como defecto para bonsai tiene el que a veces seca ramitas y que los brotes salen perpendiculares hacia arriba y son difíciles de alambrar sin que aparezcan los tan odiados "mangos de paraguas", aunque esto al engordar las ramas y con el aspecto "llorón" de estos árboles queda en un aspecto algo más natural.
Después de la poda y un ligero alambrado. Altura sin maceta 64 cm.
Se han dejado las dos ramas del ápice sin cortar para que engorde y se defina más.
Lateral.
Trasera, también se ha aprovechado para sanear una herida en la parte trasera del árbol.
Otro lateral.
En el próximo trasplante me he propuesto levantarlo un poco de la parte derecha, creo que estará mejor.
1 comentario:
pues a mó me gusta ,no tengo ninguno pero me parece muy interesante por lo que has comentado,yo cada vez prefiero especies autóctonas con menos problemas,tendré que poner uno en mi colección un saludo
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